Kicillof le tomó juramento a Alak, que asume con una oposición fracturada en La Plata
Coronando la apuesta política que hizo en la ciudad, Axel K...
Coronando la apuesta política que hizo en la ciudad, Axel Kicillof fue quien le tomó juramento a Julio Alak que, 16 años después, inicia su quinto periodo al frente del municipio de La Plata. Fue una modalidad inédita para la asunción de un intendente.
Así, queda ratificada la centralidad de la capital bonaerense en el proyecto político del gobernador, que en estas elecciones jugó fuerte para tener candidato propio en esta jurisdicción y, ya con Alak electo, supervisó de cerca el armado del gabinete municipal.
A la ceremonia que se realizó este martes en el Pasaje Dardo Rocha, Kicillof desembarcó en el escenario con gran parte de su gabinete y estuvo a cargo del discurso de cierre. Ahí, calificó la campaña como "una verdadera gesta" y un ejemplo de "cómo se gana una ciudad con un proyecto".
Para el armado de Kicillof, el triunfo en La Plata representa un vértice político para consolidar un bastión regional junto con Ensenada, gestionado por Mario Secco, y Berisso, al mando de Fabián Cagliardi, dos intendentes muy cercanos al gobernador. Incluso, el año pasado Kicillof reflotó la idea de agrupar a esos distritos en una misma sección electoral.
Alak fue recíproco y tildó a Kicillof como "el mejor gobernador de la historia", a la vez que sintonizó con el foco retórico que puso la estructura provincial para recuperar el municipio: "Vamos a ser la Gran ciudad capital de la provincia de Buenos Aires", dijo.
Además del detalle del gobernador tomando juramento, el regreso de Alak a la intendencia (gobernó entre 1991 y 2007) escenificó un mensaje de unidad transversal del peronismo platense, con presencias incluso como las del exintendente Pablo Bruera y su hermano Gabriel.
En el Concejo Deliberante, Alak tendrá el bloque más voluminoso, con diez bancas, ya que Juntos por el Cambio se partió en tres en su estreno como oposición en la ciudad. La Libertad Avanza, en tanto, tendrá una bancada de dos.
Kicillof arrastra una deuda de 1.100 millones con Garro que ahora hereda Alak
A pesar de algunos intentos iniciales por buscar imponer un nombre para la presidencia del Concejo, la derrota de Julio Garro caló hondo en la interna y no se llegó a unificar criterios entre las distintas patas.
Así, Alak tuvo allanado el camino para colocar al abogado Marcelo Galland como presidente del cuerpo. De todos modos, el oficialismo platense deberá explorar consensos entre la oposición atomizada para conseguir el quorum necesario para el avance de proyectos clave.
"PRO-Juntos por el Cambio", alineado a Garro, es el bloque opositor más numeroso, con seis concejales y presidido por Juan Martínez Garmendia. Hay un monobloque, de la concejal Belén Muñoz, que responde a quien fue candidato de Patricia Bullrich en la ciudad, Juan Pablo Allan.
Una tercera escisión la integran los radicales, con tres ediles, junto con Melany Horomadiuk, que responde al diputado Daniel Lipovetzky, que ya este año manifestó intenciones de ir por la intendencia. Esa unión conformó la bancada de "UCR + PRO por la ciudad".
Pero voces de ese espacio señalaron a LPO que "es un hecho" la incorporación a ese bloque del expresidente del Concejo Javier Mor Roig, quien posee una licencia en su banca al ocupar un asiento por la oposición en la Autoridad del Agua.
Además de Kicillof, Alak fue acompañado en el escenario por buena parte del gabinete bonaerense.
De darse ese retorno y a la bancada de UCR + PRO, quien perdería un concejal es el bloque alineado a Garro, donde se alista la concejal Julia Matheos, que suplantó a Mor Roig.
En el radicalismo ya se manifiestan lejos de Garro y apuestan a "liderar un proceso político centro-popular en La Plata", según denominó a LPO uno de los referentes de ese espacio que, además de Lipovetzky, integra al exdiputado Diego Rovella y a la línea de Evolución Radical que tiene como principal referente al titular del comité platense, Pablo Nicoletti.
En ese armado plantearon que buscarán tener "la centralidad política para construir una alternativa", pero aseguraron que serán una "oposición responsable", al tiempo que ven a Alak con "una mirada bastante institucionalista" con "apertura" al diálogo con la oposición.