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Incomunicados: el drama de toda una región por la falta de colectivos

En medio de una fuerte preocupación, vecinos y funcionarios de Darregueira y Puan vienen llevando adelante intensas gestiones para restituir el servicio interurbano de pasajeros en la primera de e...

Incomunicados: el drama de toda una región por la falta de colectivos

En medio de una fuerte preocupación, vecinos y funcionarios de Darregueira y Puan vienen llevando adelante intensas gestiones para restituir el servicio interurbano de pasajeros en la primera de e...

En medio de una fuerte preocupación, vecinos y funcionarios de Darregueira y Puan vienen llevando adelante intensas gestiones para restituir el servicio interurbano de pasajeros en la primera de estas ciudades, ya que la única empresa que funcionaba dio de baja el servicio desde diciembre.

El problema no solo afecta a esta población, sino también a varias de sus alrededores. No es algo que haya ocurrido de un día para el otro, pero se intensificó a partir de la pandemia: el encierro y las restricciones provocaron que muchas empresas y líneas dejaran de funcionar y que, una vez terminada la emergencia, decidieran no retomar algunos corredores.

Así, en muchos casos las posibilidades de servicio se vieron restringidas e incluso hubo que llevar a cabo intensas negociaciones a nivel local y zona para que algunos lugares no quedaran aislados. En muchos de estos sitios temían que la falta de conectividad terminara de ocasionar el daño que ya había generado, décadas atrás, el cierre de los ferrocarriles: ramal que se cierra, pueblo que desaparece.

Hoy en día, a partir del 1 de este mes, la cuestión es simple: cualquier persona que quiera viajar desde Darregueira hacia Bahía Blanca, Santa Rosa o Pigüé lo debe hacer a dedo o en vehículo propio.

Para llegar a Bahía Blanca o Santa Rosa, desde Darregueira hay que desandar los casi 70 kilómetros que la separan del acceso a Villa Iris, sobre la ruta nacional 35, para recién allí tomar un colectivo de línea; para Puan, cabecera de su distrito, no hay ningún tipo de transporte, y recién allí se puede conseguir un colectivo -el único que funciona- hasta Pigüé y la ruta nacional 33.

La situación se replica en otras poblaciones del área y del corredor, ya sean Bordenave, Felipe Solá o 17 de Agosto. También afecta a otras cercanas, como Guatraché, en La Pampa, o San Miguel Arcángel, que si bien pertenece a Adolfo Alsina, está más emparentado a Darregueira que a Carhué por una cuestión de cercanía.

Ni siquiera las combis dan una solución, ya que en la población tampoco funcionan. Por cuestiones operativas, solo circulan comisionistas que, con suerte, pueden llevar dos o tres personas, pero no más. Algunos usan o comparten taxis o remises, con el costo que ello implica.

La cuestión, preocupante de por sí, llegó al Concejo Deliberante de Puan, donde en forma unánime se solicitó la intervención del Gobierno nacional para la restitución del servicio de larga distancia que la empresa Chevallier brindaba entre el distrito y la ciudad de Buenos Aires. También se instó a notificar de lo que está ocurriendo al secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, y a las comisiones de transporte de las cámaras de Senadores y Diputados.

Asimismo, se reclamó que el Ejecutivo puanense se expida al respecto.

Según el proyecto de resolución, el retiro de la empresa Chevallier dejó “sin cobertura de pasajes y encomiendas a las localidades de Puan, Bordenave y Darregueira”.

Esto “termina dejando sin opciones de traslado alguno, lo que genera un aislamiento completo para muchos habitantes del distrito”, por lo cual “vecinos, comerciantes y empresas manifestaron la necesidad urgente de restitución del servicio”.

En ese sentido, también se recuerda que “es competencia del Gobierno nacional garantizar a los habitantes servicios básicos de esta índole, tratándose de un servicio interprovincial”.

En comunicación con La Nueva., quien tuvo a su cargo la oficina de Chevallier en Darregueira, Alicia Berón, señaló que el último colectivo que pasó por la localidad fue el domingo 1 de este mes y que, a partir de ese momento, la población quedó incomunicada.

“Esto es algo que se viene dando desde la pandemia, cuando el Plusmar que hacía Darregueira-La Plata dejó de funcionar y después no vino más. Y ahora pasa esto: quedan muchos pueblos aislados porque no hay servicio para Santa Rosa, Pigüé o Bahía Blanca”, comentó.

Entonces, para tomar un colectivo, “hay que ir a dedo o de alguna manera hasta Villa Iris o Jacinto Aráuz”.

“No entra ningún colectivo de línea a Darregueira. La agencia cerró y no quedó sistema de pasajes. Pero como tenemos terminal, la gente cree que tiene colectivos para irse. ‘¿Y cómo vuelvo?’, nos dicen”, lamenta.

Berón explica que no tiene respuestas a estos interrogantes cuando alguien va a buscar pasajes.

“Ahora es una época más tranquila, pero ¿qué va a pasar en la época en que viajen los estudiantes? ¿O si alguien tiene que ir a una ciudad a hacerse estudios médicos? Nos están dejando a la deriva”, se preguntó.

A partir de esta cuestión, comenzó una campaña en las redes para juntar firmas y vecinos, y reclamar al Ejecutivo y al Concejo Deliberante que colaboren ante esta problemática.

También circula el formulario web “Que vuelvan los colectivos”, mediante el cual los firmantes solicitan a los gobiernos nacional y provincial la restitución de los servicios de media y larga distancia en el distrito de Puan.

En la página se solicita el nombre, DNI y correo electrónico del firmante.

Fuente: https://www.lanueva.com/nota/2024-12-14-5-0-15-incomunicados-el-drama-de-toda-una-region-por-la-falta-de-colectivos

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