¿Cuál es la propuesta del bahiense Federico Castoldi, el nuevo director del INTA Bordenave?
“La idea es no seguir haciendo lo mismo, sino que debemos ajustarnos y adecuarnos a los problemas y oportunidades que se presentan. En tal sentido, formulé una metodología desde afuera hacia ad...
“La idea es no seguir haciendo lo mismo, sino que debemos ajustarnos y adecuarnos a los problemas y oportunidades que se presentan. En tal sentido, formulé una metodología desde afuera hacia adentro que nos permita identificar claramente cuáles son esos problemas y oportunidades vigentes en el corto plazo. Esto nos posibilitará estar en la agenda y en sintonía con el medio”.
La declaración de principios corresponde al Ing. Agr. Federico Castoldi, flamante director de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) del INTA Bordenave, ubicada a 6,5 kilómetros de la localidad homónima del distrito de Puan y a 160 Kms. de Bahía Blanca.
“¿Qué significa desde afuera hacia adentro? Segmentar cuál es la población objetiva y destinataria para preguntarle cuál es el problema actual. Ellos, de manera natural e instantánea, lo dirán y hablarán de esas cuestiones. Básicamente, es dejarnos impregnar de manera directa por esas visiones para, luego, ir en procura de las soluciones”, amplió.
“El INTA sólo se justifica a partir de lo que pueda generar hacia afuera. Después, cómo nos organicemos adentro se entiende si generamos un valor agregado en nuestras poblaciones objetivas”, explicó.
Fundada en 1928 —a 4 años de cumplir el centenario, al mismo tiempo que la ciudad de Bahía Blanca llegará el bicentenario—, la Experimental posee 4 agencias de extensión y abarca a los partidos de Bahía Blanca, Saavedra, Puan, Tornquist, Coronel Rosales, Coronel Pringles y Monte Hermoso.
“En esos distritos tenemos dos zonas bien diferenciadas. Una subhúmeda, que abarca el Sistema de Ventania, y otra semiárida, con sistemas mixtos con 70 % de ganadería y 30 % de agricultura. Esto es desde el ámbito rural, pero otro lugar de trabajo es el acompañamiento a las producciones alternativas, periurbanas y de agricultura familiar, entre otros”, dijo Castoldi.
“Hoy tenemos 22 producciones que son acompañadas por mis compañeros del INTA de esta EEA que van hasta pescadores artesanales, turismo rural, apicultores, ovinos, porcinos, conservas y ferias hasta panificados y demás”, amplió.
“También está el trabajo urbano, vinculado con la docencia, la gestión institucional, el nexo campo-ciudad y la formación de concientización del cuidado del medio ambiente”, dijo.
“Desde Bordenave también llegamos a niveles nacional e internacional con bienes y servicios. Desde 1928, la EEA se caracteriza en el desarrollo de cultivares de verdeo, de trigo y soja, que son reconocidos en toda la Argentina. Con esto no se puede soslayar la producción ganadera, claro”, sostuvo.
Daniela Gómez, técnica laboratorista del laboratorio de Calidad de Forrajes.
“Parte de la propuesta es el fortalecimiento de los consejeros del INTA, que están integrados por representantes de organizaciones de productores, de entidades educativas, científicas y tecnológicas, quienes nos permitirán el diálogo que alentamos”, señaló.
“En este sentido, algo importante es que nuestras máximas autoridades no pertenecen a la institución. Nosotros tenemos un consejo y eso permite que el INTA no se mire todo el tiempo a sí mismo, sino que deciden ellos. Y, además de ser un control social, nos orientan hacia dónde es conveniente que dirijamos las actividades”, comentó.
El Téc. Mauro Desch (izq.) y el auxiliar Jesús Asencio, del Área de Fitopatología Vegetal, donde se trabaja junto a Pablo Campos.
“La sinergia con otras instituciones relacionadas con el sector tiene la intención de responder a un modelo de innovación interactivo distinto al paradigma anterior vinculado a una determinada linealidad, donde unos desarrollan cuestiones y otros las tenían que asumir”, dijo.
“Es decir, la idea es que no haya una brecha entre innovación y recepción de la innovación”, aseguró.
Desde la Estación Experimental Agropecuario también se fomenta la producción ganadera para carne a pasto.
“Nos parece que se ajusta a los sistemas productivos y para el ambiente de una ganadería pastoril, ya que tiene un balance positivo de secuestro de carbono”, aseguró.
Téc. Marcos Dirassar, del laboratorio de Calidad Maltera, del Grupo de Mejoramiento y Calidad Vegetal.
“Esto es muy importante en un momento en que la ganadería está cuestionada por ser responsable de emisión de gases de efecto invernadero a través del metano”, expresó.
“Hay investigaciones que han demostrado que, en un sistema pastoril, se secuestra seis veces más de lo que se emite. En tal sentido, la ganadería debe buscar valores que la reencuentren con la comunidad en general”, sostuvo.
El titular del INTA Bordenave destacó, en otro tramo de la charla con La Nueva., la función primordial de la cooperadora del organismo.
Téc. laboratorista. Andrea Pizzano, del laboratorio de Análisis de Suelo.
“La actividad de los grupos de la cooperadora es muy valorada, ya que tiene una gran fortaleza para generar recursos desde el ámbito privado. No es un detalle menor en esta coyuntura”, dijo.
“Además, es una expresión de la valoración de los productos y servicios que presenta habitualmente la Estación Experimental Agropecuaria”, agregó.
De recorrida, junto al Dr. Germán A. González, de la Red de Cebada.
Actualmente, la institución posee 59 convenios con empresas privadas, lo que redunda en la generación de fondos para un mejor y mayor desarrollo de sus actividades.
“¿La comunicación? Es un punto clave, ya sea interna o externa. Para eso es necesario un plan estratégico en un doble sentido: con los profesionales que tenemos, pero también porque la innovación no termina hasta que se comunica. Y eso debe hacerse bien”, aseguró Castoldi.
Apoyo de campo: Adrián Schaefer (izq.), Marcelo Kinter y Maximiliano Moretini, del Grupo de Mejoramiento y Calidad Vegetal.
Si bien aún resta la asunción oficial, la designación lo puso en funciones —el último lunes 13 de mayo, tras ganar el correspondiente concurso— al frente del INTA Bordenave y allí estará por los venideros cuatro años.
“Prevemos que la inauguración oficial sea con un evento comunitario en una jornada de capacitación a puertas abiertas para aprovechar, también, el turismo rural, y alentar la visita de especialistas de diferentes lugares”, comentó.
Marcelo Stadler, de la EEA del INTA Bordenave.
“Tenemos mucho vínculo con las escuelas agrotécnicas y con los Centros Educativos para la Producción Total (CEPT) y por eso se nos ocurrió un encuentro con estudiantes de séptimo año. Entendemos que podemos concretarlo en unos tres meses. Al margen de esta circunstancia, la idea es que haya actividad de intercambio durante casi todo el año”, indicó.
“También queremos poner en valor a las instalaciones de la EEA. Se destaca que fue levantada por los ingleses, que en sus 600 hectáreas posee mucha arboleda y, además, aún conserva inmuebles de aquella época”, agregó.
Algo personalEl Ing. Agr. Federico Castoldi tiene 55 años. Está casado con Patricia Dumrauf y son padres de 4 hijos: Fausto, Piero, Francisco y Agustín.
Se crió en Pasaje Granaderos, entre Rodríguez y Sarmiento, en Bahía Blanca. Más tarde se mudaron al barrio Patagonia.
Sus padres son Alfredo Jorge Castoldi, gerente técnico de LU2 Radio Bahía Blanca y de Telenueva Canal 9 (luego Cable Total) durante 34 años, y Florinda Torquatti, en una familia de 6 hijos: Fabiola, Francisco, Fátima, Fernando, Florencia y Federico.
Todos los ciclos de estudio los hizo en el Don Bosco y, luego ingresó a la Universidad Nacional del Sur para recibirse en el año 1996.
Ingresó al INTA en 2008 y ha desempeñado diversos roles, incluyendo el de Coordinador Territorial en los distritos de Villarino y Patagones.
En 2017 asumió como jefe de la agencia de Extensión Rural Bahía Blanca, donde trabajó hasta asumir la dirección en el INTA Bordenave.
Es Magister en Habilidades Directivas y Gestión de Equipos de Trabajo Eficaces de la Fundación Cultural y de Estudios Sociales con sede en Valencia, España.
Además, es profesor universitario en Ciencias Agrarias, titulado por la Universidad de la Cuenca del Plata.
Desde 1990 es productor agropecuario en la zona de Cabildo en un establecimiento familiar.