Maragata desde siempre, Cielo Tailmitte expuso cual es el pensamiento que el FdT tiene pensado llevar  adelante en cuanto al funcionamiento del Consejo Escolar de Patagones desde diciembre próximo.

Por FM TIEMPO conto que “cuando me convocaron me pareció una oportunidad maravillosa de sumar un granito de arena desde otro lugar, porque los lugares de los que vengo son los que siempre estamos reconociendo, sintiendo lo que necesitamos del Consejo Escolar. Por eso creo que llegó el momento de hacer algo para que esas necesidades dejen de serlo y se transformen en derechos cumplidos”, destaco.

“Hay muchos pedidos y quejas. Hay una falta de presencia de las autoridades del Consejo Escolar a lo largo y ancho del distrito de Patagones. A veces, cuando estamos muy metidos en nuestro trabajo, no vemos las injusticias que nuestros vecinos del partido padecen”, opino.

En este sentido señalo que una de las cosas que más le llamo la atención es que “hace tres años que el Consejo no está en el territorio, es decir en el interior del partido. Una de las primicias que tiene es estar en las distintas comunidades para facilitar el acceso a los bienes que le corresponden a cada institución. Para eso está el Consejo”.

Por ello adelantó que una de las propuestas de su espacio será que el órgano educativo se reúna periódicamente en las distintas localidades del partido.

Asimismo dijo que pretende que los recursos que lleguen “se repartan en forma equitativa y a tiempo. Esa es nuestra preocupación”, señalo.

Tailmitte cursó todos sus estudios y actividad docente en los tres niveles en Carmen de Patagones, además de estar vinculada al sindicato Suteba y a instituciones de Derechos Humanos ya que es hija de desaparecidos.

La lista

Sobre la conformación de la lista manifestó estar “conforme ya que es heterogénea. Las personas que la integramos venimos de espacios de militancia y pertenencia muy diversos. Pero tenemos una idea y un proyecto en común y eso hace que sea enriquecedor”.

Presencialidad

Finalmente y tras resaltar la labor incansable de los docentes y las familias durante la pandemia, Tailmitte dijo que fue “un gran desafío aprender una nueva manera de relacionarnos como lo fue con la virtualidad. Tuvimos la no presencia física, mantener la distancia, construir puentes a través de la eventualidad que es lo que  para lo que no estábamos preparados, sobre todo con las familias con mayores necesidades y donde había pocos aparatos tecnológicos”, finalizó.