“No me quiero morir”: el dramático pedido de ayuda del ingeniero apuñalado en Palermo
“No me quiero morir”. Con estas palabras, Mariano Barbieri, de 42 años, buscó ayuda en una heladería ubicada en la esquina de Avenida del Libertador y Lafinur. Hasta allí h...
“No me quiero morir”. Con estas palabras, Mariano Barbieri, de 42 años, buscó ayuda en una heladería ubicada en la esquina de Avenida del Libertador y Lafinur. Hasta allí había llegado muy malherido, cerca de las 22:45 del miércoles. Minutos antes, cuando transitaba por las inmediaciones de aquel cruce en Palermo, el hombre -que trabajaba como ingeniero civil- había recibido un certero puntazo en su corazón que le terminó costando la vida. "Mi amor, papá de mi bebé, te amo hasta el último de mis días. Por favor, dame fuerzas para criar a nuestro hijo", escribió Melina, su pareja, a través de las redes sociales al enterarse del trágico episodio.
Según trascendió, el ingeniero civil había recibido una puñalada de parte de un delincuente que intentó robarle su celular en el pecho cuando caminaba por el Parque Tres de Febrero. En ese mismo lugar fue hallado por un móvil de CN5 un cuchillo con sangre y si bien faltan las pericias de rigor, para las autoridades se trataría del arma con la que fue atacado. "Anoche estuvimos rastrillando y no hay luz acá. Es muy extenso", fue la excusa del comisario al ser consultado sobre porque no recogieron antes los elementos sospechosos en la escena del crimen. Resulta que el hecho ocurrió cerca de la medianoche y más de ocho horas después, el arma homicida seguía en el lugar sin resguardo.
Quién es el trapero uruguayo que fue arrestado por robar en un country en ArgentinaAdemás del cuchillo, en el lugar los periodistas -ante la falta de respuestas de los efectivos porteños- también encontraron un pantalón que podría ser de interés para la causa. Tras ser atacado por el ladrón, Barbieri caminó con la grave herida en su pecho varios metros. entró en una heladería de la zona y, con las pocas fuerzas que le quedaban, pidió por ayuda antes de caer desplomado en el suelo. “Entré a trabajar acá y vi que había un chico que gritaba y pedía ayuda, nunca lo relacioné con un asalto. Vi que entró a la heladería y cayó arrodillado. Crucé de chusma y era un pibe que le habían robado y lo habían apuñalado”, contó Marcelo, quien se encontraba justo en ese momento en el comercio.
De acuerdo con el empleado de un hotel ubicado a metros del lugar, la víctima llegó a dar su nombre y uno de los testigos le pidió las "redes sociales" para contactar a sus seres queridos. ”Llegó a dar su nombre, Mariano, y una señora le pidió las redes sociales. Estaba consciente y decía ‘no me quiero morir´, pobre pibe”, dijo el hombre en diálogo con Radio Mitre.
El testigo relató que luego el encargado del lugar llamó al 911 y el patrullero llegó pocos minutos después. Al lugar llegaron efectivos de la Comisaría Vecinal 14 C de la Policía de la Ciudad, los cuales vieron que la víctima ya se encontraba recostada en el piso del negocio con una herida sangrante en el pecho. A pesar del dolor, Mariano le volvió a contar a los uniformados que una persona "le había robado" el teléfono celular y luego lo hirió con un cuchillo.
Mientras tanto, los empleados de la heladería -muchos de ellos en completo estado de shock por la situación- señalaron que el hombre ingresó herido desde la calle pidiendo por ayuda. En las imágenes de una cámara de seguridad instalada en el interior del comercio, se puede ver el momento en el que la víctima ingresó al lugar, se acercó al mostrador y se desplomó sobre el piso con evidentes signos de dolor.
Un cliente trató de asistirlo, mientras que uno de los cuatro empleados que se encontraban de turno se encargó de llamar al 911 para dar aviso de la situación y, minutos más tarde, llegaron los efectivos policiales y una ambulancia del SAME que trasladó a la víctima al hospital Fernández, donde finalmente falleció. El caso quedó en manos de la jueza de turno, Yamil Bernan, quien abrió una causa por homicidio en ocasión de robo.
En el mismo interviene la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 36, a cargo del fiscal Marcelo Munilla Lacasa. "Nuestro hijo siempre sabrá que su papá era un loco que vivió la vida a pleno. Te amo Mariano. Sos, fuiste y serás el amor de mi vida. Mi hijito es la luz de mis ojos, dame fuerza mi cielo. Espérame allá en muchísimo tiempo, pero nos vamos a reencontrar", escribió la pareja de la víctima en sus redes sociales envuelta en un inmenso dolor.