Milei cortó los fondos y Bariloche se quedaría sin importantes obras
Son varias obras con montos millonarios.
La terminal de ómnibus, la ampliación del hospital Ramón Carrillo y de la avenida Bustillo son obras fundamentales para el crecimiento y el desarrollo ordenado de la ciudad. Su continuidad y finalización peligra debido a la falta del envío de fondos por parte del gobierno nacional.
“Desde Nación han planteado que la obra pública es un gasto y nosotros no lo entendemos así; para nosotros es necesaria, no sólo porque transforma y mejora la calidad de vida de las vecinas y los vecinos, sino porque genera fuentes de trabajo y reactiva la economía”, sostuvo el Ministro de Obras y Servicios Públicos de Río Negro, Alejandro Echarrren.
En lo que respecta a las obras que en la ciudad andina se plantearon desde su origen con financiamiento mixto (50% a cargo de Nación y 50 de Provincia), como es el caso de la terminal y la ampliación del hospital, Echarren señaló que “hasta ahora no existe por parte de Nación ninguna definición ni señal de qué va a pasar con las partidas comprometidas ni con las certificaciones adeudadas".
Los trabajos en la nueva terminal, que se paralizaron en febrero de este año, contaban con un avance del 33%. “Hasta la fecha, Nación sólo cumplió con una de las cuotas del financiamiento, adeudando, desde el año 2023 dos desembolsos que suman un total de $279.300.000. El aporte nacional no llega al 24%, contra un 76% que aportó Provincia”, dijo el funcionario.
En el hospital, en tanto, la Provincia lleva invertido hasta el momento $4.565.416.071, es decir que el 86% de la inversión se realizó con recursos provinciales. Esta obra registra un avance del 88%. “Aquí, el Estado Nacional adeuda $86.871.980, habiendo aportado hasta el momento sólo el 14% del financiamiento”, comentó Echarren.
Por otro lado, la ejecución de la ampliación de avenida Bustillo, enteramente financiada con recursos nacionales, quedó suspendida con un 33% de avance, en octubre del año pasado. La deuda acumulada por Nación por certificados impagos asciende a más de $160.000.000.
“En este escenario, y aunque la Provincia haga un gran esfuerzo financiero para mantener el ritmo de los trabajos, el desconocimiento por parte de Nación y el actual contexto económico desfavorable del país repercuten en su desarrollo, y torna cada vez más más compleja su continuidad”, indicó.