La inédita historia de las cuatro trabajadoras que participaron en un remate feria
La coincidencia generalizada de las cuatro protagonistas de esta particular historia es que, más allá de tratarse de tareas que habitualmente realizan en otros ámbitos, el hecho de participar de...
La coincidencia generalizada de las cuatro protagonistas de esta particular historia es que, más allá de tratarse de tareas que habitualmente realizan en otros ámbitos, el hecho de participar de manera formal en la previa de un remate feria de bovinos parece haberles cambiado la vida.
El hecho sucedió en el predio de la Sociedad Rural de Bahía Blanca, en Bordeu.
Pero no sólo el impacto es respecto de ellas, sino el hecho sienta precedente en una actividad de campo que estaba restringida a los hombres, pero que, ahora, se muestra abierta a una mayor integración (en respuesta a una demanda cada vez más generalizada).
La historia dirá que, el último miércoles 4, por primera vez en la historia cuatro mujeres participaron en el movimiento de hacienda destinada al remate feria de las firmas consignatarias Vittori Ercazti y Productores Rurales del Sud.
Bajo la responsabilidad del delegado Diego Avila, las actividades de las trabajadoras se concentraron en la previa de la jornada de remate de los animales remitidos por ganaderos de distintos lugares de la región cercana a la ciudad, en un momento de extrema actividad estacional para el sector bovino.
La tarea puntual fue clasificar, apartar y arrear la hacienda al corral.
La consigna clave, expresada por las mismas jóvenes, fue integrarse a trabajar en equipo y permanecer atentas a todos los movimientos alrededor de los corrales habida cuenta de que el manejo de la hacienda no es algo sencillo.
De todas maneras, por lo apreciado tras la jornada laboral, la apuesta resultó un éxito para toda la cadena de protagonistas que, sin dudas, seguían estas alternativas con atención en función de futuras contrataciones de personal femenino para estas tareas.
En distintas exposiciones y en otros tipos de tareas, las cuatro se desenvuelven en actividades relacionadas con los caballos, con los animales y con el campo; en algunos casos por los vínculos familiares.
“Ha sido una experiencia única, ya que, además, al resto de las chicas las conocía por haber coincidido en otras actividades afines”, dijo Aluminé Díaz Ferracutti, quien tiene 28 años y es de General Daniel Cerri.
“Es muy bueno que nos hayan convocado para trabajar en remates de este tipo en Bordeu, ya que son muy importantes y tienen una gran repercusión”, agregó la oficial a cargo y de a caballo.
“¿El futuro? Ahora esperamos que nos sigan convocando”, sonrió Díaz Ferracutti.
“Hace bastante tiempo que quería trabajar en un remate feria. Es algo que me gusta mucho”, agregó, por su parte, Priscila Peciña, quien es de Coronel Dorrego y tiene 23 años.
“Cuando salió la propuesta me pareció algo increíble, ya que se trata de un ambiente donde actúan muchos hombres y el hecho de que se introduzca a la mujer ya es relevante”, sostuvo la tranquerera.
“Ahora pretendemos que este paso sea un ejemplo que nos permita desenvolvernos en ámbitos laborales semejantes. Nosotras queremos más trabajos de este tipo”, aseguró.
Mientras tanto, Valeska Peciña, quien es hermana de Priscila, tiene 21 años y es de Coronel Dorrego, dijo que vivió una experiencia que realmente no esperaba.
“Estoy feliz de hacerla hecho y, especialmente, por la expectativa de tener continuidad en este tipo de actividades. Me he sentido muy a gusto”, manifestó la peona a caballo.
“¿La verdad? No podría sentirme mejor, ya que me encanta trabajar con los animales”, afirmó Nicole Mansilla, quien tiene 19 años y es de Bahía Blanca.
“¿Qué se debe tener en cuenta para esta labor? Hay que estar concentrada, prestar atención, no estar (sic) con el celular y ser organizada respecto del rol de cada una en el grupo que nos asignen. Lo demás es actitud de cada una”, explicó Nicole, quien también es peona a caballo.
La presencia gremial“El trabajo que se realiza en los remates feria de las consignatarias de Bahía Blanca es con la hacienda, ya sea en la descarga de los animales de camiones jaula, el pesaje, la clasificación y la posterior ubicación en cada uno de los corrales”, sostuvo Ariel Piangatelli, secretario general de la delegación Bahía Blanca de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre).
“¿Qué significa la presencia de trabajadoras por primera vez en esta función? Para nosotros es muy importante coincidir con este proceso”, dijo.
“Se trata de darles el espacio que se merecen. Está claro de que ellas están calificadas, que tienen conocimientos del tema y que trabajan con animales en distintos ámbitos, tanto con los bovinos como con los caballos”, agregó el gremialista, quien fue uno de los principales impulsores del proyecto.
“Pero también es importante, a través de ellas, visibilizar el trabajo que hacen no sólo en Bahía Blanca, sino a lo largo y a lo ancho del país, ya sea en esta actividad como en otras semejantes dentro del campo", afirmó.
“Está claro de que las compañeras trabajan, y ayudan, a sus parejas todos los días del año y no en todos los casos cobran un salario, tal como sí sucede en este caso”, explicó.
Piangatelli dijo que algunas de las trabajadoras que realizaron su primera experiencia son del distrito de Bahía Blanca y que otras trabajan en campos de la zona, como en el partido de Coronel Dorrego.
“Incluso, alguna de ellas estudian y con este trabajo se ganan un jornal y costean parte de su educación”, afirmó.
Sobre la actividad puntual en el predio de la Sociedad Rural de Bahía Blanca en Bordeu, el gremialista manifestó: “Les irán tomando la mano en la medida de que lo vayan haciendo, pero es muy importante que conozcan de hacienda, que hayan trabajado con animales, con vacunos en algún momento, ya que no deja de ser un oficio, y no cualquiera lo puede hacer de cero, sino que se requiere experiencia”.
También señaló la importancia de sentar un precedente inédito con la acción del miércoles 4.
“Pero esto lo vemos en todos los ámbitos. Sabemos que la mujer tiene un compromiso y responsabilidad especiales en el trabajo”, señaló.
“En la medida de que se sientan cómodas y puedan desarrollarse profesionalmente para conocer todos los detalles del oficio, la idea es que tengan continuidad. Nosotros también trabajamos para lograr eso”, amplió.
Respecto de la articulación con las consignatarias locales Vittori Ercazti y Productores Rurales del Sud, el secretario general de la delegación Bahía Blanca de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre) ponderó el aporte clave para concretar este proyecto laboral dirigido a trabajadoras.
“Queremos valorar la predisposición de las dos firmas con las cuales tenemos una excelente relación y donde, siempre a través del diálogo, hemos ido logrando mejoras sustanciales para quienes actúan en este sector”, sostuvo.
“Se trata de un espacio de trabajo digno, cuidado y de gente muy capacitada”, concluyó Piangatelli.