"Hay casos de los cuales uno no se olvida nunca", dijo el fiscal de la "Casa del horror"
"Estamos conformes. Creemos que es una sentencia justa que hizo hincapié en la extensión del daño causado a ambas víctimas, que no tiene remedio", expresó el fiscal de la causa Marcelo Romero ...
"Estamos conformes. Creemos que es una sentencia justa que hizo hincapié en la extensión del daño causado a ambas víctimas, que no tiene remedio", expresó el fiscal de la causa Marcelo Romero Jardín en LU2.
No obstante, explicó que el caso le tocó una fibra personal: "Es uno de los casos más movilizantes que me tocó trabajar. Fue muy extenso. Fue la deliveración de jurado más larga que he visto".
"Hay casos como este que traspasan la barrera que uno pone para que no le afecte la salud. Uno no se olvida nunca de estos casos. Fue una larga y compleja investigación", agregó.
El profesional mencionó las consecuencias con las que conviven las víctimas, y consideró: "Van a tener que seguir con tratamiento psicológico de por vida. Creo que es una de las condenas más importantes de la historia bahiense".
Si bien dos de las tres personas imputadas fueron condenadas, Romero Jardín opinó sobre el familiar que no recibió una pena: Se decidió que estas dos personas eran las culpables y que una tercera persona que estaba imputada no había tenido responsabilidad, aunque la fiscalía sostenía que sí. Son las reglas del juego en un juicio por jurado".
"Yo tengo varias sospechas de personas que habrían tenido relaciones y que no fueron identificadas. Todo esto de acuerdo al relato de las niñas. Lo que pasa es que una cosa es lo que uno piensa y otra cosa es lo que uno puede probar", concluyó.
La condena
La sanción fue dispuesta por la jueza del Tribunal en lo Criminal N° 2, Claudia Fortunatti, quien dirigió técnicamente el juicio por jurados en el que ambos sujetos fueron declarados culpables.
El padre fue condenado a 42 años de prisión por el abuso sexual con acceso carnal a sus dos hijas entre el año 2012 y 2019 cuanddo tenían entre 9 y 16 años. Por su parte, al padrino de una de las niñas se lo encontró culpable de someter a las hermanas a diversas prácticas sexuales que se reiteraron durante el período comprendido entre 2011 y 2019.
La abuela de las menores había sido declarada no culpable y se desistió de acusar al tío, porque durante el juicio no surgieron elementos que lo vincularan directamente con los aberrantes delitos. Ambos fueron asesorados por el abogado Valentín Fernández.
