Escuchar artículo

Ganadería: aún con valores firmes, la relación de reposición favorece la compra

“En general, durante la primera mitad del año y hasta prácticamente la salida del invierno, la relación de reposición medida entre el valor del ternero de invernada y el precio del novillito ...

Ganadería: aún con valores firmes, la relación de reposición favorece la compra

“En general, durante la primera mitad del año y hasta prácticamente la salida del invierno, la relación de reposición medida entre el valor del ternero de invernada y el precio del novillito ...

“En general, durante la primera mitad del año y hasta prácticamente la salida del invierno, la relación de reposición medida entre el valor del ternero de invernada y el precio del novillito gordo listo para faena suele estar mucho más influenciada por la disponibilidad de terneros y su ritmo de salida de los campos, asociado a sus condiciones forrajeras, que por grandes fluctuaciones en el precio del gordo”.

Para María Julia Aiassa, analista de mercados ganaderos del Rosgan, si bien el año arrancó climáticamente muy diferente al ciclo anterior, a partir de mediados del otoño la situación comenzó a cambiar.

“Las lluvias se cortaron de manera muy marcada en los últimos dos meses, lo que dio inicio a un invierno muy duro no sólo por la falta de humedad acumulada sino, fundamentalmente, por las bajas temperaturas registradas a inicios de julio”, comentó.

En tal sentido, recordó que durante la primera semana de este mismo mes, las marcas térmicas resultaron muy inferiores a lo normal, generando varios días con heladas severas que restringieron drásticamente la receptividad de los campos.

Estos eventos climáticos se están repitiendo en varias zonas del centro-sur pampeano en los últimos días del mes.

“Aun así, los valores de la invernada se mantienen relativamente firmes”, aseguró.

“La escasez de terneros que comienza a marcarse para esta época del año, habiendo transcurrido cerca del 50 % de la zafra, evita, en cierto modo, que los valores se deterioren en forma más pronunciada”, añadió.

La consultora también dijo que los precios registrados en los diferentes remates realizados en el marco de la Exposición Rural de Palermo, en CABA, dan cuenta de un mercado que intenta afirmarse, aunque sin abandonar la cautela.

Recordó que, en promedio, los valores para los terneros rondaron los 2.400 pesos a $ 2.500 el kilo, con máximos registrados por lotes especiales que, alentados también por la muy buena financiación ofrecida por los bancos, llegaron a pagarse hasta 2.900 pesos el kilo.

El promedio para terneros —registrado por el Rosgan— fue de 2.525 pesos el kilo, un 10 % respecto de lo marcado en el último remate habitual.

Valor del ternero según el Rosgan.

“Al analizar la serie de los últimos 10 años vemos que, aun considerando estos últimos valores registrados en la muestra de Palermo, el precio del ternero sigue estando ligeramente por debajo del promedio de la serie (2.620 pesos) e, incluso, retrasado entre 20 % y 25 % respecto de los valores registrados a igual fecha en los últimos 3 años previos a la seca; es decir, de 2022, 2021 y 2020”, explicó.

“En efecto, en lo que va del año, descontada la inflación mayorista (IPIM), el precio del ternero acumula una pérdida real del 20 % mientras que, el del novillito gordo en el MAG se apreció en más de un 10 % respecto de los valores registrados en diciembre del año pasado”, sostuvo.

Si bien el consumo aún no dinamiza las ventas, la escasez de hacienda terminada tracciona los valores en el mercado.

Aiassa añadió que esto conlleva a que la relación de reposición del ternero siga siendo muy favorable para el engordador.

“El precio de compra por kilo vivo se ubica actualmente aproximadamente un 15 % por sobre el valor de venta del animal terminado, todavía por debajo de lo que marca el promedio de los últimos 5 años y entre 10 y 15 puntos debajo de lo que supo valer a esta misma fecha en los últimos años previos a la seca pasada, más semejantes en cuanto a disponibilidad”, describió.

Insistió en que, estacionalmente, el precio del ternero debería empezar a afirmarse a partir de este agosto (a medida de que se reduce la oferta).

“Paralelamente, es el momento en el que los feedlots deberían empezar a descargar con mayor fluidez gran parte de la hacienda que se encuentra en engorde”, contó.

“De ser así, esto presionará ligeramente sobre el valor del gordo y generará, en consecuencia, un encarecimiento en la relación de reposición”, aseguró.

“Por el momento, a pesar de esta primera señal de fortalecimiento del precio del ternero, las subas que ha estado registrado el gordo en los últimos 10 días erosionan, parcialmente, la mejora que debería estar mostrando la relación de reposición”, comentó.

Relación entre ternero y gordo.

La especialista agregó que, si bien el consumo aún no está dinamizando las ventas, la escasez de hacienda terminada es la que está traccionando los valores en el mercado.

También que los datos preliminares de faena estimados a partir del traslado de animales informado por el Senasa (Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Agroalimentaria) muestran una nueva caída en la faena del mes de julio, con mermas que en promedio rondan el 8 % novillos, novillitos y vaquillonas y el 15 % en vacas.

El panorama de los feedlots

Si bien en un contexto climáticamente muy diferente al observado el año pasado, los feedlots llegaron a la mitad del año marcando un nuevo récord en cantidad de animales encerrados (de acuerdo con un informe del Rosgan).

Según los datos reportados por Senasa, al 1 de julio del corriente 2024 los corrales albergaban un total de 2,046 millones de cabezas en stock cifra que, en números absolutos, supera la marca del año pasado, cuando en un contexto de fuerte seca llegaron a alojar hasta 2,03 millones de animales.

Sucede que, a pesar de las diferencias impuestas por el clima, el valor de la invernada prácticamente no ha logrado despegarse de los pisos registrados durante la zafra pasada.

En consecuencia, la relación de precios entre el gordo y este ternero de reposición resulta históricamente baja. Esto ha generado —según se indicó— una muy buena oportunidad de compra para los engordadores durante estos meses de zafra favorecidos, a su vez, por un precio del maíz hasta el momento barato y una reducción (no menor) en el costo financiero del negocio por la baja de tasas.

Para este segundo semestre los feedlots suelen aportar entre el 30 % y el 35 % de la oferta total que llegan a faena.

En adelante, a medida que la oferta de terneros comience a reducirse, algo que estacionalmente debiera comenzar a ocurrir a partir de este mes, el costo de esta reposición debería recuperar firmeza, máxime ante un valor del gordo que seguirá muy condicionado a la evolución de un mercado interno todavía debilitado.

Si se observa la relación de ingresos y egresos de animales de los feedlots, luego del fuerte llenado registrado durante el mes de mayo, junio resultó mucho más neutral.

Para este segundo semestre los feedlots suelen aportar entre el 30 % y el 35 % de la oferta total que llegan a faena.

La cantidad de animales que ingresaron a los corrales durante el último mes pasó de 542.000 a 374.000, mientras que los egresos pasaron de 395.000 a 373.000, determinando así un índice de reposición equivalente a 1; es decir que se repuso prácticamente la misma cantidad de animales terminados en ese mismo mes. A partir de ahora, los feedlots deberían entrar en un período de lento vaciamiento del stock.

Su comportamiento estacional indica que, a partir de este segundo semestre del año, la oferta de hacienda terminada debería comenzar a llegar con mayor contundencia al mercado.

Durante este período, los feedlots suelen aportar entre el 30 % y el 35 % de la oferta total de animales que llegan a faena.

En lo que va del año, la cantidad de animales enviados se contrajo en un 10 % respecto de 2023, un año en el cual el ritmo se mantuvo prácticamente constante durante todo el año por la fuerte presión de oferta registrada durante los primeros meses.

Este año, a pesar de las diferencias que surgen desde el aspecto climático, tampoco se aprecia —se detalló— una estacionalidad muy marcada en el ritmo de faena entre el primer y segundo semestre del año.

Por lo tanto, si el año pasado se llegó a faenar más de 14,5 millones de animales en todo el ciclo, la proyección para este año debería situarse en torno a los 13,1 y 13,3 millones, dependiendo de cuan oportuna resulte la llegada de la primavera.

Fuente: https://www.lanueva.com/nota/2024-8-20-5-0-42-ganaderia-aun-con-valores-firmes-la-relacion-de-reposicion-favorece-la-compra

Volver arriba