Coronel Pringles: “Este hombre no tuvo ningún tipo de humanidad”

La inspectora de la Guardia Urbana de Coronel Pringles que deberá someterse a cirugía por las ...

La inspectora de la Guardia Urbana de Coronel Pringles que deberá someterse a cirugía por las lesiones graves sufridas a raíz de un violento ataque durante un procedimiento, expresó indignación porque, al menos hasta ahora, no se concretó la detención de su agresor.

Victoria Candia se refiere a Miguel Ángel Valverdi (71), a quien denunció por haberle pegado una trompada que le fracturó huesos de la nariz y le lesionó el maxilar, además de dejarla inconsciente.

La agresión ocurrió hace pocas semanas, cuando la agente municipal participaba de un operativo en relación con un intento de estafa en perjuicio de la madre del atacante en aquella ciudad.

La víctima además se mostró disgustada a raíz de que el hijo del denunciado, quien sería efectivo policial y en ese momento estaba en la escena del delito en perjuicio de su abuela, no habría intervenido después de la violenta reacción de su padre contra Candia.

"No conozco a quien me pegó pero sí a su hijo, que es oficial de la Policía de Coronel Suárez. Siendo efectivo policial tendría que haber actuado a pesar de que el agresor sea su padre", reflexionó la denunciante.

"El hijo (del victimario) trabajó ahí con la aprehensión de uno de los estafadores. Estaba parado justamente al lado de su papá cuando este señor me pegó la trompada", agregó.

"Este hombre no tuvo ningún tipo de humanidad porque no solo le pegó a una mujer, sino a una persona que estaba cumpliendo con su trabajo en ese lugar", continuó diciendo Candia.

Como consecuencia de la brutal trompada, la servidora pública resultó con fractura de huesos de la nariz y una lesión en el maxilar alto, debajo de su ojo izquierdo.

Esta conclusión médica motivó que la causa se recaratulara como "lesiones graves", en vez de la calificación inicial de "lesiones leves".

La investigación está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 9 bahiense, bajo subrogancia del fiscal Diego Conti.

Desde la fiscalía se confirmó que Valverdi todavía está en "calidad de investigado", es decir que no hay una imputación formal en su contra.

“Estoy indignada y tengo mucha bronca y tristeza porque en ningún momento le falté el respeto ni le di motivos para que me golpeara así”.

La empleada comunal pringlense hizo mención a un enfrentamiento entre hombres y mujeres que se originó algunos días antes en pleno sector céntrico de aquella localidad, caso por el cual la Policía -afirmó- detuvo a dos personas y cuyas imágenes también se "viralizaron" por medio de las redes sociales.

“Pero por lo que me pasó a mí no se detuvo a nadie, entonces me pregunto qué está pasando, por qué no hay un detenido”, resaltó la entrevistada.

“Me da para pensar que (a Valverdi) no se lo detuvo porque es el papá de… (un policía). Como mujer, como ciudadana y como agente de la GU me queda la inquietud de por qué sigue en libertad”, añadió.

"Mi familia me llama preocupada y me pregunta por qué no está detenido y sigue como si nada. No quiero pensar mal de las autoridades porque el intendente (Lisandro Matzkin) tuvo la amabilidad de difundir lo que pasó para que se hiciera público", completó .

Durante casi dos años de actividad en la Guardia Urbana, Candia nunca había sido blanco de agresiones físicas, pese a las divergencias que muchas veces puede haber entre los agentes de Tránsito y los infractores.

"En mi función se ve de todo: gente que reacciona con agresividad y se pone mal porque uno tiene que hacer su trabajo de labrar una infracción, pero siempre hay una charla posterior a la infracción en la cual se le explica al infractor los motivos de nuestro proceder", indicó.

"Tenemos en cuenta si la persona que comete una falta es, por ejemplo, un adulto mayor o alguien con discapacidad. Estamos preparados para enfrentarnos al ciudadano y explicarle nuestro accionar, si la falta es grave o no, pero siempre nos dirigimos amablemente", aseguró la pringlense de 36 años.

Como antecedente, hace menos de cuatro meses un compañero suyo también fue agredido de un piedrazo en la cara.

Secuencia. Valverdi golpeó a Candia cuando la mujer trató de impedir que el violento ingresara en el domicilio de su madre, donde se realizaban tareas investigativas luego de la tentativa de fraude en detrimento de la anciana de 90 años.

Testigos. "Mis compañeros y el periodista ‘Quique’ Laborde, que estaba haciendo una transmisión en vivo, son testigos del hecho. En ese sector (calles Stegman y 16) había seis agentes de la GU, de los cuales tres estábamos afuera del domicilio de la madre de Valverdi", detalló la informante.

Incumplimiento. Previamente el hombre había eludido con su vehículo el primer cordón de control montado por la Guardia Urbana en inmediaciones de la casa de su madre, quien ya había sido víctima de este tipo de delitos.